Cómo gestionar el desperdicio de alimentos según Vermaat Groep
La lucha contra el desperdicio de alimentos es un proceso continuo. Debic está orgulloso de clientes como Vermaat Groep porque defienden lo que es correcto. Todos deberíamos intentar desperdiciar menos alimentos y crear un futuro más sostenible. ¿Te unirás a nosotros en este viaje?
Cómo gestionar el desperdicio de alimentos según el Vermaat Groep
La lucha contra el desperdicio de alimentos es un proceso continuo. Debic está orgulloso de clientes como Vermaat Groep porque defienden lo que es correcto. Todos deberíamos intentar desperdiciar menos alimentos y crear un futuro más sostenible. ¿Te unirás a nosotros en este viaje?
El desperdicio de alimentos afecta a todas las áreas de la cadena alimentaria: desde los campos de los agricultores hasta nuestros platos. Evitar el desperdicio no es sólo una necesidad ecológica, también es importante desde el punto de vista ético y económico. ¿Sabías que un tercio de los alimentos destinados al consumo humano se desperdicia? Podemos hacerlo mejor.
"El sector de la hostelería y la restauración tiene una enorme participación en el desperdicio de alimentos. Estamos plenamente comprometidos con la mejora del problema".
Colaboramos con Too Good To Go. Vendemos los sándwiches sobrantes en nuestros locales a través de la aplicación.
Además, en 19 locales, trabajamos con un cubo de basura inteligente llamado Orbisk. Esta papelera escanea todo lo que la gente tira; la ciencia se basa en la inteligencia artificial. Por ejemplo: el cubo de basura ve que se ha tirado exactamente un kilo de tomates a las 3 de la tarde de un miércoles. Con esta información, podemos ajustar nuestras compras de productos y reducir el desperdicio de alimentos entre un 30 y un 50%.
El uso de Orbisk conlleva la necesidad de una inversión. Todavía no estamos en el nivel de pre-coronavirus, así que lo mantenemos en un total de 19 locales. La tenemos 3 meses en cada ubicación para probar el nivel de desperdicio de alimentos. Este periodo de 3 meses es tiempo suficiente para crear conciencia. Después, los cubos de basura se trasladan a otras 19 ubicaciones para reducir el desperdicio de alimentos allí.
También trabajamos con Instock. Ellos compran productos rechazados a los agricultores que no pueden vender sus verduras a los supermercados. Incorporamos esos productos a nuestros platos.
Esta aplicación tan popular, sabe lo que hay. Los vendedores de comida pueden ofrecer sus platos y productos sobrantes para recogerlos al final del día. Los usuarios de la aplicación pagan entre 3 y 5 euros por una caja misteriosa llena de comida.
Vermaat Groep utiliza Too Good To Go de varias maneras. La primera es, como ya se ha mencionado, ofreciendo los sándwiches sobrantes en sus locales. La otra forma es un concepto cerrado para locales como el Rabobank. Los empleados escanean un código QR y se llevan a casa lo que queda, también por un par de euros.
Reciclaje de posos de café y cáscaras de naranja
"Recogemos posos de café y cáscaras de naranja. Encargamos a una organización que cultive setas de ostra a partir de los posos de café y transformamos las cáscaras de naranja en aceite. Este aceite tiene un sabor muy fuerte y puede utilizarse en magdalenas de naranja, cerveza y helados.
Nuestro actual sistema de residuos no es lo suficientemente circular. Por último, dar una segunda vida a los productos o residuos (alimentarios) es más sostenible, y es mejor para el bolsillo, lo cual es una ventaja".
Debes saber qué tiras, por qué y qué pasa con tus residuos. El sector de la hostelería y la restauración, así como los consumidores particulares, no son conscientes (lo suficiente) de lo que ocurre con los 3.400 millones de toneladas de basura que se tiran en todo el mundo cada año. Compramos envases y los tiramos sin pensar. Una gran parte de los residuos (alimentarios) se vende a los países del sur de Europa, donde se vierten, porque no hay espacio para verterlos en otro lugar.
"Debemos trabajar juntos para que nuestra tierra sea más limpia. Eso significa que debemos cambiar las cosas o reorganizarlas. Merece la pena porque todos nos beneficiamos de menos residuos. También el planeta".
Consulta nuestro artículo sobre Vicente Rodríguez, que es un chef autodidacta.
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